TE QUIERO MÁS QUE A LA SAL
Existe un relato muy bonito de origen armenio, que cuenta una historia de un rey, sus tres hijas y la sal, ¡sí, la sal! misma que en nuestros días goza de una mala reputación, ya sea por cuestiones médicas o por superstición; continuamente solemos escuchar "¡Estoy salado (a)!" "No le eches la sal con tus comentarios" "¡Se cayó la sal!" etc. El punto es que la sal está presente desde tiempos antiguos. Para casi todas las culturas es un condimento básico y dentro de la literatura occidental tiene una gran relevancia, evoca una vida sencilla. TE QUIERO MAS QUE A LA SAL (" Las tres hijas del rey") Había una vez un rey que tenía tres hijas y quiso saber cuál de las tres lo quería más. Un día le preguntó a la mayor: - Hija mía, ¿tú cuánto me quieres? -¡Ay!, padre, yo más que al aceite. Y el rey quedó satisfecho con la respuesta. Luego se dirigió a la segunda y le preguntó lo mismo y la hija le contestó: - Yo te quiero